yo

Lo único que no se.

Lo único que quiero.

No puedo decidir

no se que necesito,

siento tanto que...

hoy no quiero amanecer.

Soñar para olvidar,

soñar para por fin descansar.

En el aula

Duermen, piensan, ella explica.

Ellos, simplemente de cuerpo presente.

De repente, risas.

Lee un poema

sigue indignada

pero sin poder hacer nada,

sigue leyendo.

Al fondo, sonrisas,

vuelve a sonar Quevedo:

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-Es galán, y es como un oro;

tiene quebrado el color;

persona de gran valor,

tan cristiano como moro;

pues que da y quita el decoro

y quebranta cualquier fuero,

poderoso caballero

es don Dinero.

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Termina la explicacion

y empiezan las preguntas.

Dejo de ausentarme.

Tres realidades

Rotulador rojo.

En realidad morado.

Una noche en otro mundo:

-¿Pagamos a medias?

-¿Tanto cuesta?

-No

-Deja que te invite.

-Tú deja que te quiera.

Un cigarro,

humo denso.

Muere en un plástico,

húmedo o seco, da igual.

No necesito nada,

soy feliz con lo que tengo...

Cada vez más borrada,

cada vez más llena.

Paz.

Tranquilidad...

Me relajo.

Paso mi energía.

Duermes.

Duermo.

Se me olvidó

Se me olvidó olvidarte, no aprendo como no recordarte, como olvidar todo...me siento perdida, de nuevo sin salida.

Me enamoré de nuevo de quien no debí hacerlo.

No estoy preparada, lo se, podría intentar estarlo acompañada...no quiero estar sola.

Me entretengo.

Cambio mi rumbo.

Me voy lejos.

Huyo.

Vuelvo.

No tengo hambre.

No paro de comer.

Vivo.

Siento que muero poco a poco.

Vuelvo a echar de menos.

Me enseñas.

("lo agradezco")

Estoy orgullosa.

Te vuelvo a echar de menos.